El Taekwondo y los Niños

La disciplina un gran valor formativo en los niños

Comenzar a temprana edad la practica del Taekwondo es lo ideal, observar a los niños, como se pasan en continuo movimiento y espontánea actividad física nos lleva a pensar la importancia del movimiento para conseguir una serie de ellos que a la vez le diviertan y resulten altamente educativos y beneficiosos para su desarrollo fisco y mental.

La estructura social moderna restringe excesivamente la área de expansión del niño, la vida educativa y laboral le obligan a estar cada vez más tiempo sentado y quieto, el televisor, ordenadores, juegos electrónicos, lo absorben; de ahí la necesidad de interesarlo, encauzarlo a la actividad física desde pequeño. El Taekwondo como arte marcial y deporte reúne la condición física, mental, para canalizar las energías del niño desarrollando las nociones de obligación, carácter, disciplina, derecho, personalidad, valor, prudencia, saber ganar o perder con elegancia.

Pedagógicamente es un medio para poner de relieve las virtudes y defectos del niño, ofreciendo la ocasión de conocerlos, encauzar sus energías hacia buenos hábitos, tan necesarios para su formación. El Taekwondo infantil a diferencia del de los adultos, está orientado a entrenar el movimiento, mejorar la coordinación, a desarrollar una actitud mental de autocontrol y disciplina, un entretenimiento, un juego que estimule y que poco a poco le entregue valores, en especial de cortesía y a medida que crece, paciencia, humildad y hacerlo consciente del conocimiento adquirido.

El Gimnasio se convierte en un lugar especial para él. Hay una finalidad común, entrenar, ejercitar, compartir, hacer del Taekwondo un juego entretenido, fortalecer el espíritu desde niño es un gran aporte a su formación, un aporte importante de los padres hacia los hijos es interesarlos con una actividad física que le permita en el futuro un desarrollo mucho más amplio de sus capacidades intelectuales, espirituales y físicas.

Los Pumses ayudan y mejoran la coordinación motriz en los niños. Esta combinación de golpes de mano y pie permite poner de relieve no solo la fuerza física, sino también la armonía en la coordinación; el combate no es sólo una demostración de quién puede ser mejor para pelear. Por naturaleza los niños no ven maldad en sus combates, pasan a ser meramente deportivos , la verdadera importancia es lograr en ellos un justo equilibrio.

En resumen el Taekwondo Olímpico es una disciplina moderna ideal para los niños, los prepara no, solo para competir, aunque la vida es una permanente competición.